Su Excelencia la Primera Ministra Mia Mottley,
Su Excelencia la Primera Ministra Sheikh Hasina,
Su Excelencia el Presidente Volkan Bozkir,
Secretaria General Adjunta Amina Mohammed,
Excelencias, queridos colegas y amigos:
La COVID-19 ha evidenciado los efectos devastadores sobre la salud, las sociedades y las economías de un microbio para el que no teníamos tratamientos ni vacunas.
Sin embargo, la pandemia también ha puesto de manifiesto los retos que supone organizar una respuesta mundial coordinada a una amenaza mundial.
Es vital que juntos mostremos el mismo apremio, la misma innovación y la misma solidaridad para hacer frente a la resistencia a los antimicrobianos y abordar los retos que hemos afrontado en la respuesta a la pandemia.
Nos complace que Su Excelencia Mia Mottley, Primera Ministra de Barbados, y Su Excelencia Sheik Hasina, Primera Ministra de Bangladesh, copresidan el Grupo de liderazgo mundial sobre la resistencia a los antimicrobianos con arreglo al principio de «Una sola salud», que está desempeñando un papel esencial en la promoción de medidas urgentes para combatir la amenaza de la resistencia a los antimicrobianos.
Les agradezco su liderazgo.
A través de nuestra secretaría conjunta tripartita sobre la resistencia a los antimicrobianos, hemos estado trabajando estrechamente con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, la Organización Mundial de Sanidad Animal y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente con el fin de responder a la amenaza mundial que representa la resistencia a los antimicrobianos.
Esta alianza multisectorial es esencial para nuestros esfuerzos.
La pandemia de COVID-19 ha sido una dura ilustración de la necesidad de trabajar en todos los sectores con arreglo a un enfoque de «Una sola salud» con el fin de integrar los esfuerzos por proteger la salud de los seres humanos, los animales y nuestro planeta.
La pandemia de COVID-19 también ha demostrado la urgencia de abordar una debilidad evidente en nuestros sistemas de salud de todo el mundo: la falta de agua y saneamiento.
El personal sanitario de un tercio de los centros de salud del mundo no tiene dónde lavarse las manos en los puntos de atención.
Sin la prevención y el control de las infecciones, no podemos detener la propagación de la resistencia a los antimicrobianos.
Por eso también nos alienta ver que se ha incluido un nuevo indicador en los Objetivos de Desarrollo Sostenible relativo a las infecciones del torrente sanguíneo en relación con la resistencia a los antimicrobianos con el fin de fortalecer la capacidad en los países.
Esto es especialmente importante para apoyar los esfuerzos de los países de ingresos bajos y medios en materia de alerta temprana y gestión de los riesgos para la salud nacionales y mundiales.
Para terminar, insto a todos los países a que firmen el Llamamiento a la Acción contra la Resistencia a los Antimicrobianos de 2021. Ya ha recabado un importante apoyo.
Es urgente que las naciones de todo el mundo se unan con el fin de comprometerse y seguir con la lucha mundial para detener la resistencia a los antimicrobianos.
Gracias.