Excelentísima señora Ziroat Mirziyoyeva, Primera Dama de Uzbekistán,

Excelentísima señora Emine Erdoğan, Primera Dama de Türkiye,

Excelentísima señora Lucrecia Peinado, Primera Dama de Guatemala,

Excelentísima señora Tamara Vučić, Primera Dama de Serbia,

Excelentísima señora Ana Dias Lourenço, Primera Dama de Angola,

Dr. James Downing,

Honorables ministros,

Estimados colegas y amigos:

Quiero dar las gracias a Uzbekistán y al Hospital St. Jude por organizar este acto, así como por su liderazgo y su colaboración en este ámbito.

Hace siete años, en la tercera reunión de alto nivel de las Naciones Unidas sobre las enfermedades no transmisibles, me reuní con el Dr. Downing, quien me presentó a un joven salvadoreño llamado Gabo que había sobrevivido al cáncer.

No hace mucho tiempo, el tipo de cáncer infantil que padecía Gabo habría sido probablemente una sentencia de muerte en países como el suyo.

Sin embargo, gracias al tratamiento que recibió con el apoyo del Hospital de Investigación Infantil St. Jude, Gabo se recuperó.

La noche siguiente yo debía intervenir en el festival Global Citizen en el Central Park de Nueva York.

Decidí llevar a Gabo conmigo al escenario para que contara su historia al público. Cuando dijo que estaba en remisión, el lugar estalló en vítores. Fue un momento extraordinario.

Y son precisamente estos momentos los que está haciendo posible la colaboración de la OMS con el Hospital St. Jude.

Todos los niños con cáncer merecen tener la oportunidad de luchar contra esta enfermedad, sin importar de qué país provengan ni a qué grupo poblacional pertenezcan. Por eso pusimos en marcha la Iniciativa Mundial de la OMS contra el Cáncer Infantil.

Los resultados hablan por sí solos: hasta ahora, se han beneficiado de esta iniciativa más de 400 000 niños de 80 países que viven en países ingresos bajos y medianos.

Avanzamos con paso firme hacia nuestro objetivo de lograr una supervivencia del 60 % de aquí a 2030. Es el mismo objetivo que se recoge en la Declaración Política que se examinará mañana.

El año pasado pusimos en marcha la Plataforma Mundial para el Acceso a los Medicamentos contra el Cáncer Infantil a fin de que todos los niños dispongan de medicamentos que les salven la vida.

Miles de niños ya se están beneficiando de ello.

Hoy he conocido a Samira, una joven uzbeka de 17 años que ha sobrevivido al cáncer.

Su historia nos inspira a todos y demuestra la importancia de esta labor.

Excelencias:

Nuestros progresos solo han sido posibles gracias a su liderazgo político, a la dedicación de los defensores de esta causa y a nuestras alianzas.

La colaboración entre la OMS y el Hospital de Investigación Pediátrica St. Jude es una piedra angular de estos avances y estamos firmemente comprometidos a seguir consolidándola.

Trabajemos juntos para que todos los niños reciban la atención que necesitan, sin importar quiénes sean ni dónde vivan.

Porque todos ellos merecen una oportunidad para luchar.

Muchas gracias.