Resumen de la situatión
Descripción de la situación
La República Centroafricana ha experimentado un aumento de casos de sarampión como resultado de los brotes producidos desde 2019. El primer caso de sarampión se registró en la semana cinco de 2019 (semana que comenzó el 28 de enero de 2019) y el brote ha continuado hasta la semana siete de 2020 (semana que comenzó el 10 de febrero de 2020) y ha afectado a 18 distritos sanitarios, incluidos 12 nuevos en 2020 (Bimbo, Bégoua, Bangui I, Bangui II y Bangui III en la zona urbana, y Bossémbélé, Bouar, Bozoum, Baboua-Abba, Haute-Kotto, Nangha-Boguila y Ouango-Gambo en la zona rural).
Del 1 de enero de 2019 al 16 de febrero de 2020 se han notificado en total 7626 casos sospechosos, 83 de ellos mortales (tasa de letalidad: 1,08%). Una gran proporción de los casos (el 72%) eran menores de cinco años, y el 18% tenían entre cinco y 10 años. En el laboratorio de referencia del Instituto Pasteur en Bangui se analizaron, mediante detección de anticuerpos de inmunoglobulina M (IgM), un total de 1167 muestras de casos sospechosos, de las cuales 180 fueron positivas para el sarampión.
La baja cobertura de la vacunación sistemática contra el sarampión en los últimos cinco años (inferior al 60% para la primera dosis a los nueve meses), la ausencia de una segunda dosis de vacuna en el calendario nacional de vacunación y las inadecuadas campañas de seguimiento dieron lugar a una elevada proporción de personas susceptibles de contraer la enfermedad, lo que propició que se produjese la epidemia en curso. Existe riesgo de que se produzca un brote de sarampión en los 35 distritos sanitarios y, sin una respuesta adecuada, la epidemia podría extenderse por todo el país. El número de distritos afectados por el brote de sarampión va en aumento. A fecha de 1 de marzo de 2020, son 15 los que se han visto afectados: Alindao, Alindao-Mingala, Baboua-Abba, Bambari, Bangui I, Bangui II, Bangui III, Bégoua, Bimbo, Bococaranga-Koui, Bossémbélé, Bouar, Bozoum, Haute-Kotto, Nangha-Boguila, Ngaoundaye y Ouango-Gambo.
En diciembre de 2019, los brotes afectaron a ocho distritos sanitarios y el país organizó campañas locales de vacunación contra el sarampión dirigidas a niños de seis a 59 meses en siete distritos (Bambari, Batangafo, Bocaranga-Koui, Grimari-Kouango, Kémo, Ngaoundaye y Nana-Gribizi). A pesar de una cobertura de vacunación superior al 95%, confirmada mediante una encuesta, se están registrando nuevos casos en esos distritos y en distritos sanitarios adyacentes, en niños de cinco a 15 años. Sobre la base de la distribución de los casos por edades indicada en investigaciones epidemiológicas, la estrategia de vacunación propuesta se centrará en el grupo de riesgo de seis meses a 10 años para ayudar a detener la transmisión.
Respuesta de salud pública
Desde la declaración oficial del brote por el Ministerio de Salud el 24 de enero de 2020, se han tomado las siguientes medidas de salud pública:
- Se han activado el COUSP (centro de operaciones de emergencia en salud pública) y el comité local de crisis para coordinar la respuesta.
- El Ministerio de Salud, con el apoyo de la OMS y otros asociados, está elaborando un plan de respuesta integral con campañas de vacunación.
- Se ha reforzado la vigilancia epidemiológica en las zonas afectadas.
- Se ha establecido un sistema para transferir los casos graves de sarampión al hospital de salud del distrito y para ofrecer atención gratuita a todos los casos.
- Se están distribuyendo medicamentos y suministros médicos para apoyar una prestación de atención médica gratuita.
- Se han establecido unidades de aislamiento en el hospital de distrito.
- Se está reforzando el programa de inmunización sistemática.
- Se están llevando a cabo actividades de promoción de la salud y de comunicación de riesgos.
- Se está trabajando en la movilización de recursos para responder al brote.
Evaluación del riesgo por la OMS
La OMS estima que el riesgo general para la República Centroafricana como consecuencia del actual brote de sarampión es «elevado» por las siguientes razones:
- La expansión geográfica de la epidemia en nuevos distritos sanitarios.
- El elevado número de distritos con alto riesgo de que se produzcan brotes de sarampión debido a su baja cobertura vacunal.
- Un aumento en el número de casos notificados en 2019 en comparación con 2018.
- El contexto de seguridad del país que dificulta el establecimiento de medidas de respuesta rápida en los distritos sanitarios afectados.
- La falta de infraestructura, insumos y recursos para garantizar la atención sanitaria gratuita.
- La falta de personal formado para el tratamiento clínico de la enfermedad en caso de complicaciones.
- Una cobertura vacunal subóptima de la primera dosis de vacuna antisarampionosa (MCV1) del 49% en los últimos cinco años, según datos obtenidos conjuntamente por la OMS y el UNICEF, y una cobertura de inmunización del 71% en 2019, según datos administrativos.
- Grandes movimientos de población entre localidades vacunadas y no vacunadas.
El riesgo a nivel regional se considera moderado debido a los grandes movimientos transfronterizos de poblaciones hacia y desde países vecinos, incluidos el Chad, la República Democrática del Congo y el Camerún, tanto por razones de seguridad como por actividades comerciales.
El riesgo se considera bajo a nivel mundial.
Consejos de la OMS
El sarampión es una enfermedad prevenible mediante vacunación para la que se recomiendan dos dosis de la vacuna antisarampionosa (MCV) para asegurar la inmunidad.
La OMS insta a todos los Estados Miembros a:
- Vacunar sistemáticamente a los niños contra el sarampión y realizar campañas de inmunización masiva en países con un elevado número de casos y altas tasas mortalidad, a fin de reducir las muertes por esta enfermedad.
- Conseguir y mantener una cobertura mínima del 95% con la primera y segunda dosis de MCV.
- Vacunar a las poblaciones de riesgo: niños pequeños, mujeres embarazadas, personal sanitario, personas que trabajan en el sector del turismo y el transporte y viajeros internacionales.
- Reforzar la vigilancia epidemiológica de casos de fiebre y exantema para detectar a tiempo todos los casos sospechosos de sarampión en los centros de atención sanitaria públicos y privados y velar por que los laboratorios reciban las muestras en un plazo de cinco días a partir de la fecha de su toma.
- Como estrategia de salud pública fundamental, incorporar al programa de vacunación de niños la administración de vitamina A para reducir la morbilidad y la mortalidad debidas a la infección por sarampión y para interrumpir la transmisión.
- Teniendo en cuenta la información disponible sobre el brote en estos momentos, la OMS no recomienda la aplicación de restricciones al comercio con la República Centroafricana ni a los viajes a ese país.
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