Datos y cifras
- El tracoma es una enfermedad ocular que resulta de la infección por la bacteria Chlamydia trachomatis.
- Constituye un problema de salud pública en 32 países y causa ceguera o discapacidad visual a 1,9 millones de personas.
- La ceguera causada por el tracoma es difícil de revertir.
- Según los datos de abril de 2025, 103 millones de personas viven en zonas donde el tracoma es endémico y corren riesgo de padecer ceguera.
- Esta infección se propaga mediante el contacto personal (a través de las manos, las prendas de vestir, la ropa de cama y las superficies duras) y por medio de moscas que han estado en contacto con secreciones oculares y nasales de personas infectadas. Cuando se sufren infecciones repetidas a lo largo de varios años, puede ocurrir que las pestañas se reviertan hacia el interior del ojo y se froten contra el globo ocular, lo que provoca dolor y, en algunos casos, daños permanentes en la córnea.
- En 2024 se operó a 87 349 personas con tracoma en una fase avanzada y se trató con antibióticos a 44,4 millones de personas. Ese año, la cobertura antibiótica a nivel mundial fue del 39%.
Panorama general
El tracoma es la principal enfermedad infecciosa causante de ceguera en el mundo. La ocasiona una bacteria intracelular estricta denominada Chlamydia trachomatis y se transmite de forma directa o indirecta a partir de secreciones oculares y nasales de personas infectadas, especialmente niños pequeños, que son su reservorio principal. Además, algunas especies de moscas también pueden propagar estas secreciones.
Epidemiología y características clínicas
En las zonas endémicas, el tracoma activo (inflamatorio) es común entre los niños de edad preescolar, con unas tasas de prevalencia que pueden llegar a ser de hasta un 60 % a un 90 %. Después de esa edad, la infección es menos frecuente y más breve. Por lo general, se contrae cuando se vive en estrecha cercanía con personas que tienen la enfermedad activa; por esta razón, la familia es el principal entorno de transmisión. El sistema inmunitario puede eliminar la primoinfección, pero en las comunidades endémicas es habitual reinfectarse.
Después de años de infecciones repetidas, el interior del párpado puede quedar tan gravemente marcado de cicatrices conjuntivales tracomatosas que se acaba plegando hacia adentro, de modo que las pestañas se frotan contra el globo ocular, lo que da lugar a molestias constantes e intolerancia a la luz. Este fenómeno se denomina «triquiasis tracomatosa» y, junto con otras alteraciones del ojo, puede dejar cicatrices en la córnea. Si no se trata, la triquiasis genera opacidades irreversibles que acaban causando discapacidad visual o ceguera. La edad a la que esto ocurre depende de varios factores, como la intensidad de la transmisión local. En las comunidades con gran endemicidad puede suceder en la infancia, aunque lo más común es que aparezca entre los 30 y los 40 años.
La discapacidad visual y la ceguera afectan a la vida de las personas y sus familias, que habitualmente se encuentran en situaciones de pobreza extrema. El número de mujeres que quedan ciegas cuadruplica el de los hombres, probablemente a causa del contacto cercano con niños infectados y, por consiguiente, de la mayor frecuencia de reinfección.
Los factores ambientales asociados a la mayor intensidad de la transmisión de C. trachomatis son:
- la higiene insuficiente
- el hacinamiento en el hogar
- el acceso insuficiente al agua
- el acceso insuficiente al saneamiento y la utilización inadecuada de esos servicios.
Distribución
El tracoma es hiperendémico en muchas de las zonas más pobres y rurales de África, Asia, América Central y del Sur, Australia y Oriente Medio.
Causa ceguera o discapacidad visual a unos 1,9 millones de personas y, en términos globales, alrededor del 1,4% de los casos de ceguera de cualquier tipo a nivel mundial son producto del tracoma.
En general, África sigue siendo el continente más afectado y el que aplica actividades más intensamente para luchar contra el tracoma. Al 18 de octubre de 2025, la OMS ha certificado la eliminación de esta enfermedad como problema de salud pública en 25 países: Arabia Saudita, Benin, Burundi, Camboya, China, Gambia, Ghana, India, Irak, Malawi, Malí, Marruecos, Mauritania, México, Myanmar, Nepal, Omán, Pakistán, Papua Nueva Guinea, República Democrática Popular Lao, República Islámica del Irán, Senegal, Togo, Vanuatu y Viet Nam.
Repercusiones económicas
El impacto del tracoma en las personas y comunidades afectadas es enorme. Se calcula que la ceguera y la discapacidad visual dan lugar a unas pérdidas de productividad de entre USD 2900 y USD 5300 millones anuales, y que alcanza los USD 8000 millones si se incluye la triquiasis.
Prevención y control
En los países endémicos se están ejecutando programas de eliminación mediante la estrategia SAFE recomendada por la OMS, que consiste en:
- el tratamiento quirúrgico de la triquiasis tracomatosa (la fase de la enfermedad que causa ceguera);
- la administración de antibióticos para eliminar la infección, en particular mediante la administración masiva de azitromicina, donada por el fabricante a través de la Iniciativa Internacional contra el Tracoma;
- la mejora de la higiene facial; y
- las mejoras ambientales, en particular del acceso al agua y el saneamiento.
La mayoría de los países endémicos están agilizando la aplicación de esta estrategia a fin de alcanzar las metas de eliminación.
Los datos correspondientes a 2024 notificados a la OMS por los Estados Miembros muestran que ese año se practicó una intervención quirúrgica correctiva a 87 349 personas afectadas de triquiasis tracomatosa y que se trató con antibióticos a 44,4 millones de personas en las comunidades endémicas para eliminar la enfermedad.
Es necesario seguir trabajando para eliminar el tracoma y alcanzar así la meta fijada por la Asamblea Mundial de la Salud en su resolución WHA51.11, a saber, eliminar esta enfermedad como problema de salud pública. (1) La colaboración plena de todos los sectores relacionados con el agua, el saneamiento y el desarrollo socioeconómico es especialmente importante para lograrlo.
Respuesta de la OMS
En 1993, la OMS adoptó la estrategia SAFE en aplicación de su mandato de liderar y coordinar la acción internacional para eliminar el tracoma como problema de salud pública y de informar sobre los progresos realizados hacia la consecución de esa meta.
Más tarde, en 1996, la OMS puso en marcha la Alianza de la OMS para la Eliminación Mundial del Tracoma en 2020. Se trata de una alianza para ayudar a los Estados Miembros a aplicar la estrategia SAFE y a mejorar su capacidad nacional mediante estudios epidemiológicos, el seguimiento y la vigilancia de la enfermedad, la evaluación de proyectos y la movilización de recursos.
La Asamblea Mundial de la Salud adoptó en 1998 la resolución WHA51.11, en la que se fijó el objetivo de eliminar el tracoma como problema de salud pública para 2020. La Hoja de ruta para las ETD 2021-2030, que la Asamblea Mundial de la Salud hizo suya en 2020 en virtud de su decisión WHA73(33), prorrogó hasta 2030 el plazo para la eliminación mundial de esta enfermedad.
(1) Para certificar la eliminación del tracoma como problema de salud pública deben cumplirse estas condiciones: a) una prevalencia de los casos de triquiasis tracomatosa «que no sean del conocimiento del sistema de salud» inferior al 0,2 % en los adultos de 15 años o más (es decir, aproximadamente un caso por cada 1000 habitantes), b) una prevalencia de la inflamación tracomatosa folicular en los niños de 1 a 9 años inferior al 5 %, mantenida durante al menos dos años sin tratamiento antibiótico masivo, en todos los distritos donde antes era endémica la enfermedad, y c) la existencia de un sistema capaz de detectar y tratar los casos nuevos de triquiasis tracomatosa utilizando estrategias definidas, y constancia de que se dispone de suficiente financiación para aplicarlas.