Olas de calor: cómo mantenerse fresco

Para protegerse durante una ola de calor:

• Manténgase fresco y bien hidratado.
• Mantenga su hogar fresco.
• Proteja a los lactantes y a los niños.
• Evite el calor. Trate de no salir a la calle durante las horas más calurosas del día.
• Permanezca en la sombra. Recuerde que la temperatura se mide a la sombra, y que puede aumentar entre 10 y 15 °C si está al sol.
• Evite, si es posible, la actividad física extenuante. Si ha de llevar a cabo actividades exigentes, hágalas durante las horas más frescas del día, por ejemplo por la mañana, entre las 4.00 horas y las 7.00 horas
• No deje a los niños ni a los animales en vehículos estacionados.
• Trasládese a la habitación más fresca de la casa, sobre todo por la noche.
• Si no es posible mantener fresco el hogar, pase de dos a tres horas al día en un lugar fresco (como un edificio público con aire acondicionado).
• Póngase periódicamente en contacto con las personas vulnerables de su entorno, en particular las personas mayores de 65 años y las personas con afecciones cardíacas, pulmonares o renales, discapacidad o que viven solas.

Para mantenerse fresco durante una ola de calor:

• A fin de evitar que el calor se acumule, utilice prendas y ropa de cama ligera y holgada, y prescinda de los cojines.
• Tome duchas o baños fríos.
• Mójese la piel con un paño húmedo o utilizando un aerosol o ropa mojada.
• Beba periódicamente agua (un vaso de agua cada hora, y al menos dos o tres litros al día), y evite el alcohol y el exceso de cafeína.
• Si sale a la calle, use un sombrero de ala ancha o una gorra y gafas de sol.

Una insolación es una urgencia médica que puede llegar a ser mortal. Si usted u otras personas sienten debilidad, mareos o náuseas, dejan de sudar, muestran signos de delirio o pierden el conocimiento, busquen atención médica de inmediato.

Es fundamental tomarse en serio las insolaciones y actuar con celeridad, ya que el menor retraso puede acarrear complicaciones graves o incluso la muerte.

1. Pida ayuda médica de emergencia

Antes de hacer cualquier otra cosa, llame de inmediato a los servicios de emergencia para solicitar asistencia médica profesional.

2. Medidas agresivas para reducir la temperatura

Mientras espera que llegue la ayuda médica, use cualquier medio a su alcance para hacer que la temperatura de la persona disminuya. Traslade de inmediato a la persona a un lugar donde haya sombra o en el que haya aire acondicionado y aplique paños o toallas frías y húmedas sobre el cuerpo. Utilice bolsas de hielo y ventiladores, si están disponibles. Afloje o quite cualquier prenda de ropa innecesaria para ayudar a reducir la temperatura de la persona.

3. Mantenga la vigilancia hasta que llegue la ayuda

Haga un seguimiento del estado de la persona mientras espera a la asistencia médica. Busque signos de mejora o deterioro.

No administre ácido acetilsalicílico o paracetamol a la persona que padece la insolación. Si la persona está inconsciente, colóquela de costado.

Si durante una ola de calor se siente mareado, débil, ansioso o tiene sed y dolor de cabeza intensos, lo mejor es que busque cuanto antes un lugar fresco y se tome la temperatura corporal. Beba agua para rehidratarse.

Si experimenta espasmos musculares dolorosos (en particular en las piernas, los brazos o el abdomen), busque inmediatamente un lugar fresco para descansar y beba soluciones de rehidratación oral que contengan electrolitos. Si los calambres por calor duran más de una hora, busque atención médica. Acuda a su médico si experimenta síntomas inusuales o si estos persisten.

Durante una ola de calor, debería tratar de mantener fresco el espacio en el que reside. Compruebe la temperatura ambiente entre las 8.00 horas y las 10.00 horas, a las 13.00 horas y por la noche, después de las 22.00 horas. Idealmente, esta debería estar en todo momento por debajo de los 32 °C durante el día y de los 24 °C durante la noche. Este detalle es especialmente importante para los lactantes, los adultos mayores de 60 años o las personas con afecciones de salud crónicas.

• Abra las ventanas después de que anochezca para aprovechar la brisa nocturna y refrescar el hogar.
• Durante el día, cierre las ventanas y baje las persianas para evitar que entre la luz solar. Apague tantos dispositivos eléctricos como sea posible.
• Use ventiladores eléctricos únicamente cuando la temperatura esté por debajo de los 40 °C / 104 °F. Si la temperatura supera los 40 °C / 104 °F, los ventiladores calentarán el cuerpo.
• Si utiliza un aparato de aire acondicionado, configure el termostato a una temperatura de 27 °C / 81 °F y encienda un ventilador eléctrico; de este modo, parecerá que la temperatura en la habitación es 4 °C más fresca.
• Recuerde: puede que la sensación sea más fresca al aire libre, en la sombra.

Si tiene un aparato de aire acondicionado en su hogar, cierre puertas y ventanas y no utilice los aparatos eléctricos que no necesita para mantener el ambiente fresco, asegurarse de que sigue habiendo corriente eléctrica y reducir la posibilidad de un apagón en toda la comunidad. Aunque los ventiladores eléctricos pueden proporcionar alivio, cuando la temperatura supera los 35 °C es posible que no prevengan las enfermedades relacionadas con el calor. Es importante beber líquidos.

Para proteger a los niños durante una ola de calor:

• No deje nunca a los niños o a los animales, aunque sea poco tiempo, en vehículos estacionados, ya que las temperaturas pueden alcanzar rápidamente valores peligrosos.
• Evite la exposición directa al sol durante las horas de máxima intensidad, y busque la sombra o permanezca en interiores.
• No cubra nunca un cochecito de bebé con una tela seca, ya que eso hará que aumente la temperatura en el interior del cochecito. En su lugar, utilice un paño delgado y húmedo y humedézcalo las veces que sea necesario para bajar la temperatura. Combine esto con el uso de un ventilador portátil para mejorar la refrigeración.
• Vista a los niños con prendas ligeras y holgadas que les cubran la piel, y utilice sombreros de ala ancha, gafas de sol y filtro solar para protegerlos de los rayos del sol.
• Siga los consejos sobre cómo mantener fresco el hogar para que la temperatura en el interior no suponga un riesgo