Salud ambiental infantil: la anamnesis ambiental pediátrica
2 de octubre de 2024 | Preguntas y respuestasCómo consignar la exposición de los niños a los problemas ambientales que afectan a la salud: Una «hoja verde» en el historial clínico. Los niños pueden verse expuestos a riesgos ambientales de carácter físico, químico y biológico durante periodos cruciales del crecimiento y el desarrollo. La información sobre estas exposiciones es clave para mejorar la calidad de la atención y facilitar la vigilancia. Además, esta información permite al profesional de la salud educar a la familia, promover la prevención y mejorar la base de conocimientos sobre las enfermedades infantiles relacionadas con el medio ambiente. Sin embargo, pocos proveedores de atención de la salud están capacitados para incluir datos ambientales en los registros clínicos de los niños.
La salud ambiental infantil es la disciplina que estudia de qué manera las exposiciones ambientales, ya sean de carácter químico, nutricional o social, en las etapas tempranas de la vida influyen en la salud y el desarrollo durante la infancia y a lo largo de toda la vida. Surgió como una rama de la medicina pediátrica en la segunda mitad del siglo XX y bebe principalmente de la epidemiología, la toxicología, la salud ocupacional y las ciencias sociales. La disciplina tiene en cuenta la sensibilidad especial y singular de los niños a las amenazas ambientales.
Existen cuatro grandes categorías al evaluar los riesgos para la salud y ambientales de los niños:
- las exposiciones diversas y singulares
- la fisiología del desarrollo, incluido el sistema nervioso central
- una mayor esperanza de vida, que prolonga el tiempo para que se manifieste una enfermedad que tiene un largo periodo de latencia
- el papel de los adultos a la hora de proporcionar un entorno seguro y saludable.
La sensibilidad de los niños es un factor que habría que tener en cuenta al evaluar los riesgos para la salud, y puede ser una valiosa fuente de información sobre el tratamiento y la prevención de enfermedades relacionadas con el medio ambiente.
La anamnesis ambiental pediátrica es una herramienta primaria para reconocer, tratar y prevenir enfermedades y afecciones de salud con un componente ambiental. Se compone de una serie de preguntas básicas y concisas que ayudan a los profesionales de la salud a determinar el grado de exposición de los niños a los riesgos ambientales.
La anamnesis no es una tarea que se lleva a cabo una sola vez, sino que se enmarca en el historial clínico en sentido más amplio, que se va actualizando a menudo y se utiliza con fines de prevención, diagnóstico, tratamiento y seguimiento, según corresponda.
Al igual que sucede con las preguntas relativas al crecimiento y el desarrollo, las afecciones y el entorno social del niño, que se basan en un modelo estándar y se actualizan periódicamente, otro tanto debería suceder con las preguntas sobre el entorno físico. Formular las preguntas correctas sobre esta cuestión requiere un conocimiento adecuado de los peligros ambientales a escala local, regional y global, su importancia en las diferentes etapas de la vida y el acceso a nivel local a recursos para intervenir.
El objetivo principal de la anamnesis es sistematizar un conjunto de preguntas básicas y concisas sobre atención de la salud pediátrica, tanto para personas sanas como enfermas, y adaptarlas a las situaciones, los recursos, las necesidades y las capacidades locales.
El recurso periódico a la anamnesis por parte de los proveedores de atención de la salud permitirá mejorar la eficacia de la atención primaria de los niños, sus familias y comunidades y la calidad de la vigilancia médica y contribuirá asimismo a prevenir enfermedades y afecciones de salud con un componente ambiental.
Los proveedores de atención de la salud desempeñan funciones y responsabilidades específicas en el registro de datos ambientales y de salud, y pueden utilizar la anamnesis para:
- reconocer los efectos clínicos, subclínicos y potenciales de los factores de riesgo ambientales en la salud de los niños;
- elaborar un historial exhaustivo en lo que respecta a las exposiciones, formulando las preguntas adecuadas y consignando esta información;
- contribuir a la investigación y a la generación de conocimiento. Los datos medioambientales y sobre salud recopilados, cotejados y analizados pueden proporcionar información valiosa para subsanar las lagunas en términos de conocimientos y contribuir a la investigación;
- orientar a la comunidad y a los responsables de la toma de decisiones acerca de las amenazas ambientales para la salud infantil y plantear la introducción de cambios para mejorar las condiciones y prevenir nuevos daños; y
- trabajar para prevenir, reducir y eliminar la exposición ambiental nociva, evitando así las afecciones de salud conexas.
La decisión sobre quién lleva a cabo la anamnesis depende de las características del sistema local de salud, la disponibilidad de trabajadores de la salud y otros recursos. Dado que se trata de una actividad continuada, se pueden utilizar diferentes métodos e involucrar a distintas personas, en función de las circunstancias y los motivos de la visita.
Entre las personas encargadas de llevar a cabo la anamnesis podemos encontrar:
- profesionales de la salud que trabajan con lactantes, niños y adolescentes, como pediatras, médicos de familia, personal de enfermería, trabajadores de atención primaria de la salud, residentes, estudiantes de medicina y personal de partería;
- trabajadores sociales u oficiales de medio ambiente que visitan el hogar, la escuela, el patio de recreo u otros lugares donde los niños pasan tiempo; y
- en algunos entornos puede recurrirse a cuestionarios autoadministrados para padres o cuidadores, que pueden servir como punto de partida para la discusión durante la visita clínica.
Emplear al personal de los centros de atención de la salud que ha recibido capacitación en cuestiones medioambientales puede tener sus ventajas, ya que podrán detectar y evaluar cualquier posible amenaza en el entorno de un niño, informar a los proveedores de atención de la salud y a las autoridades y educar a los padres, los maestros y las comunidades.
Las esferas que abarca cada anamnesis dependen del contexto local, los riesgos ambientales y la situación individual de los pacientes. Entre las principales esferas que hay que tener en cuenta destacan:
- los peligros ambientales locales, como los riesgos físicos, biológicos y químicos, y su origen. Algunos ejemplos habituales son los plaguicidas, el plomo, el mercurio, la gestión de los residuos, las instalaciones de agua, saneamiento e higiene, los vectores de enfermedades y la contaminación atmosférica;
- ¿dónde, cómo y cuándo se produce la exposición de los niños a los peligros ambientales en su contexto? Las preguntas frecuentes que se pueden plantear versarán sobre el hogar o la escuela del niño, las actividades que lleva a cabo, como actividades deportivas o el trabajo, el tipo y la procedencia de los alimentos y el agua, la presencia de animales y el trabajo de los padres; y
- los antecedentes médicos y episodios médicos anteriores, incluidos los diagnósticos previos o cualquier problema de salud no explicado.
La Hoja Verde de la OMS nació con el objetivo de servir de punto de partida para los modelos de las anamnesis locales. Es el lugar en el que registrar un conjunto básico de detalles ambientales fundamentales. Puede utilizarse como punto de partida para desarrollar una anamnesis local que se considere adecuada en un lugar, una clínica, un país o un entorno concretos.
Entre otras características principales, la Hoja Verde:
- combina los posibles riesgos ambientales, incluidos los elementos considerados como recursos esenciales para prevenir las exposiciones;
- puede completarse a partir de varias fuentes de información, como observaciones clínicas y personales;
- incluye en la plantilla un espacio para estimar cualitativamente el riesgo: el «ABC» de los riesgos ambientales. Para poder llevar a cabo esta evaluación es preciso seguir una capacitación y definir una serie de criterios específicos basados en conocimientos especializados intersectoriales, así como en distintas fuentes de datos; y
- sirve de inspiración para posibles líneas de investigación, actividades de innovación y la recopilación de datos en diversos entornos.
La OMS publica un conjunto de materiales de capacitación para el sector de la salud que incluye un módulo específico sobre cómo elaborar y utilizar una anamnesis ambiental pediátrica. En 2024, el UNICEF y la OMS publicaron un curso conjunto introductorio en línea dirigido a trabajadores de la salud sobre la cuestión de la salud ambiental infantil que incluía una sección dedicada a la anamnesis.