Descripción de la situación
Resumen de la situación
El 4 de julio de 2023, el Ministerio de Salud de la República Unida de Tanzanía notificó a la OMS la detección de poliovirus circulantes de origen vacunal de tipo 2 (cVDPV2) en el país. La cepa se aisló de un paciente con parálisis flácida aguda (PFA) en la región de Rukwa, al suroeste de Tanzanía, que limita con el lago Tanganica al oeste y con Zambia al sur. La secuenciación genética del virus aislado ha indicado una vinculación estrecha con el cVDPV2 que circula en Kivu del Sur (República Demográfica del Congo).1
Las autoridades de salud pública del Ministerio de Salud están llevando a cabo más investigaciones sobre el terreno, entre otras cosas fortaleciendo la vigilancia de las PFA para detectar nuevos casos y analizando las deficiencias de inmunidad a nivel subnacional para identificar posibles poblaciones y/o zonas no inmunizadas o insuficientemente inmunizadas, a modo de orientación para las actividades de respuesta de salud pública.
La OMS considera que el riesgo general a nivel nacional es alto debido al desempeño subóptimo de la vigilancia en algunos distritos, la cobertura de vacunación insuficiente que da lugar a una baja inmunidad de la población y el movimiento continuo de población entre países vecinos.
Descripción de la situación
El 4 de julio de 2023, las autoridades en materia de salud de la República Unida de Tanzanía confirmaron y notificaron a la OMS la detección de poliovirus circulantes de origen vacunal de tipo 2 (cVDPV2) en el país. El paciente es un niño de menos de dos años que ha recibido tres dosis de la vacuna antipoliomielítica oral bivalente (bOPV), una dosis de la vacuna antipoliomielítica inactivada (IPV) de inmunización sistemática y dos dosis de bOPV durante las actividades suplementarias de inmunización en 2022, sin antecedentes de viaje documentados. Inicialmente se notificó el caso del niño como un caso de parálisis flácida aguda, sufrida a finales de mayo de 2023, de la región de Rukwa, en el suroeste de Tanzania.
Se recogieron dos muestras de heces del paciente el 30 y 31 de mayo de 2023, respectivamente, y se confirmó la detección de cVDPV2 el 30 de junio de 2023. Los resultados de la secuenciación genética mostraron que el virus aislado había sufrido 15 cambios nucleotídicos y que estaba estrechamente relacionado con la cepa circulante en Kivu del Sur (República Democrática del Congo) en 2023.1
Desde el 2022, Tanzanía ha estado participando activamente en una respuesta plurinacional al brote en toda la región sudoriental de África ante la detección de diferentes cepas del poliovirus en la subregión, entre otras cosas reforzando los niveles de inmunidad mediante campañas de vacunación masiva y fortaleciendo la capacidad de vigilancia subnacional.
Según las estimaciones de la OMS/el UNICEF de la cobertura nacional de inmunización, la cobertura tanto de la tercera dosis de la vacuna antipoliomielítica oral (OPV3) como de la primera dosis de la vacuna antipoliomielítica inactivada (IPV1) era del 88% en Tanzanía en 2022.
Epidemiología de la poliomielitis
La poliomielitis es una enfermedad muy contagiosa que afecta sobre todo a menores de 5 años y causa parálisis permanente en aproximadamente 1 de cada 200 casos de infección; la mortalidad de los casos con parálisis es del 2%-10%.
El virus se transmite de persona a persona principalmente por vía orofecal o, con menos frecuencia, a través de un vehículo común (por ejemplo, agua o alimentos contaminados) y se multiplica en el intestino, desde donde puede invadir el sistema nervioso y causar parálisis. El periodo de incubación suele ser de 7 a 10 días, aunque puede oscilar entre 4 y 35 días. Hasta un 90% de los infectados son asintomáticos o solo presentan síntomas leves, y la enfermedad suele pasar desapercibida.
El poliovirus de origen vacunal es una cepa bien documentada de poliovirus que ha mutado a partir de la cepa contenida originalmente en la vacuna antipoliomielítica oral (OPV). Las OPV contienen virus vivos atenuados que se replican en el intestino durante un periodo limitado, generando así anticuerpos y la consiguiente inmunidad. En raras ocasiones, al replicarse en el tubo digestivo, las cepas de la OPV sufren cambios genéticos y pueden propagarse en comunidades que no están totalmente vacunadas contra la poliomielitis, sobre todo en zonas donde hay poca higiene, mal saneamiento o hacinamiento. Cuanto menor es la inmunidad de la población, más tiempo sobrevive este virus y más cambios genéticos experimenta.
En casos muy raros, los poliovirus de origen vacunal (VDPV) pueden cambiar genéticamente a formas capaces de causar parálisis, como lo hacen los poliovirus salvajes. Cuando se detectan VDPV de al menos dos fuentes diferentes y con dos meses de diferencia como mínimo, estando dichos VDPV genéticamente relacionados entre sí y habiendo evidencias de transmisión en la comunidad, se habla de poliovirus «circulantes» de origen vacunal de tipo 2 (cVDPV2).
El último caso registrado de poliovirus salvaje autóctono en Tanzanía fue en 1996, y el caso de cVPDV2 en 2023 es el primer caso detectado en el país.
Respuesta de salud pública
- Se está llevando a cabo una evaluación de riesgos, dirigida por el Ministerio de Salud y apoyada por los asociados de la Iniciativa de Erradicación Mundial de la Poliomielitis, así como una investigación sobre el terreno y una planificación de una respuesta apropiada.
- La capacidad de vigilancia de la PFA del país se ha fortalecido para detectar más casos.
- Se están analizando los niveles de inmunidad a nivel subnacional para identificar posibles poblaciones y/o zonas no inmunizadas o insuficientemente inmunizadas.
Evaluación del riesgo por la OMS
La OMS considera que el riesgo general a nivel nacional es alto debido al desempeño subóptimo de la vigilancia de la PFA en algunos distritos, la cobertura de vacunación insuficiente que da lugar a una baja inmunidad de la población y a una mayor susceptibilidad entre los niños, y el movimiento continuo de población entre países vecinos.
La OMS considera que este evento supone un alto riesgo de propagación internacional y/o de aparición de cVDPV2 de esta cepa por la región, en particular por otras zonas de África central y sudoriental, debido a la baja inmunidad de la población y a unos niveles de inmunización sistemática inadecuados en algunas zonas, así como a movimientos de población a gran escala. En todos los casos, la propagación continua de los brotes actuales y la aparición de nuevos brotes de cVDPV2 parecen indicar que la cobertura de inmunización sistemática presenta lagunas y que la vacunación como respuesta al brote es deficiente.
Aunque datos recientes de la OMS y el UNICEF muestran signos prometedores de un repunte en los servicios de inmunización en algunos países, la cobertura sigue siendo insuficiente en comparación con los niveles anteriores a la pandemia, lo que pone en peligro a los niños frente a brotes epidémicos, en particular en los países de ingreso bajo. En respuesta a estos últimos datos publicados, los miembros del Consejo de Asociación de la Agenda de Inmunización 2030 hicieron un llamamiento para reforzar los esfuerzos (Agenda de Inmunización 2030) con miras a lograr la recuperación de la inmunización.
Consejos de la OMS
Es importante que todos los países, en especial aquellos que tienen contactos frecuentes con países y zonas afectadas por la poliomielitis, refuercen la vigilancia de los casos de PFA y comiencen una ampliación planificada de la vigilancia ambiental con el fin de detectar con prontitud nuevas importaciones de virus y facilitar una respuesta rápida. Los países, territorios y zonas deberían mantener también una alta cobertura de la vacunación sistemática que sea uniforme en los diferentes distritos, a fin de reducir al mínimo las consecuencias de nuevas introducciones de virus.
En su publicación Viajes internacionales y salud la OMS recomienda que todo viajero que se dirija a las zonas afectadas por la poliomielitis esté totalmente vacunado contra la enfermedad. Los residentes de zonas infectadas y los visitantes que permanezcan en ellas más de 4 semanas deberían recibir una dosis adicional de vacuna antipoliomielítica oral o inactivada entre las 4 semanas y los 12 meses anteriores al viaje.
De conformidad con el parecer del Comité de Emergencias constituido en virtud del Reglamento Sanitario Internacional (2005), el riesgo de propagación internacional de poliovirus sigue constituyendo una emergencia de salud pública de importancia internacional. Los países afectados por la transmisión del poliovirus están sujetos a recomendaciones temporales. Para cumplir dichas recomendaciones, todo país infectado por poliovirus debería declarar el brote como emergencia nacional de salud pública, asegurar la vacunación de los residentes y de los visitantes a largo plazo, y restringir en los puntos de partida la salida de viajeros que no hayan sido vacunados o no puedan demostrar que lo han sido.
La información epidemiológica más reciente sobre los cVDPV se actualiza semanalmente.
Información adicional
- Iniciativa de Erradicación Mundial de la Poliomielitis (en inglés)
- Notas descriptivas sobre la poliomielitis
- Panel de información de la OMS sobre inmunización (en inglés)
- Estado de las emergencias de salud pública, publicado por la IEMP (en inglés)
- Viajes internacionales y salud
- Poliovirus de origen vacunal (en inglés)
- Statement of the thirty-fifth Polio IHR Emergency Committee (en inglés)
- Agenda de Inmunización 2030 (en inglés)
Cita recomendada: Organización Mundial de la Salud (28 de julio de 2023). Partes sobre brotes epidémicos; Poliovirus circulante de origen vacunal de tipo 2 (cVDPV2) - República Unida de Tanzanía. Disponible en: https://www.who.int/es/emergencies/disease-outbreak-news/item/2023-DON480