Resumen de la situatión
Descripción de la situación
El 5 de septiembre de 2023, el Ministerio de Salud de Guinea notificó a la OMS un brote de difteria en curso en el país. El 4 de julio de 2023, 2 niños de 2 y 4 años acudieron al servicio de otorrinolaringología del hospital de la prefectura de Siguiri, en la región de Kankan (Guinea), por síntomas similares (disnea, disfagia, fiebre y tos). Fueron hospitalizados por amigdalitis e infección respiratoria y recibieron tratamiento antibiótico antes de ser remitidos al hospital regional de Kankan para recibir una atención adicional.
Entre el 4 de julio y el 13 de octubre de 2023, se notificaron 538 casos, incluidos 18 confirmados. En total, se han registrado 58 muertes, 13 de ellas entre los casos confirmados (tasa de letalidad del 11%, contando todos los casos), y se está haciendo un seguimiento de 461 contactos. De los casos notificados, un 62% son mujeres. Entre los casos notificados, el mayor porcentaje correspondía al grupo de edad de 1 a 4 años, con un 82% de los casos (445), seguido por el grupo de edad de 5 a 9 años, con un 5%, y el grupo de 10 años en adelante, con otro 5%. Los niños menores de 12 meses representan el 7% de los casos notificados. Ninguno de los 538 casos estaba vacunado.
La región de Kankan está dividida en cinco prefecturas y solo la prefectura de Kérouané no ha notificado casos hasta la fecha.
La prefectura de Siguiri es la más afectada, con 510 casos (un 95%). De los 363 pacientes ingresados en los centros de tratamiento de Siguiri, 37 (un 10%) han fallecido.
Otras prefecturas que están notificando casos son las de Mandiana (13 casos), Kankan (13 casos) y Kouroussa (2 casos). De los 15 pacientes ingresados en el centro de tratamiento de Kankan, 12 (un 80%) han fallecido.
Los centros de tratamiento del país carecen de la capacidad en términos de recursos humanos y materiales para tratar los casos de manera adecuada. Los casos sospechosos y confirmados recibieron amoxicilina y azitromicina como tratamiento de primera línea. Se administró profilaxis antibiótica (amoxicilina y azitromicina) a los contactos directos.
Figura 1: distribución de los casos de difteria en la región de Kankan (Guinea), al 13 de octubre de 2023
Figura 2: casos sospechosos de difteria por semana epidemiológica en Guinea, al 13 de octubre de 2023
Epidemiología
La difteria es una enfermedad altamente contagiosa que puede prevenirse mediante la vacunación y cuya causa principal es la Corynebacterium diphtheriae, así como la Corynebacterium ulcerans. Se propaga entre las personas principalmente por contacto directo o por el aire a través de gotículas respiratorias. La enfermedad puede afectar a todos los grupos de edad, pero el riesgo es mayor entre los niños no inmunizados.
Los síntomas suelen aparecer gradualmente y empiezan con dolor de garganta y fiebre. En los casos graves, la bacteria produce un veneno (toxina) que provoca la acumulación de una gruesa placa gris o blanca en la parte posterior de la garganta. Esta placa puede bloquear las vías respiratorias, dificultando la respiración o la deglución, y provoca asimismo tos perruna. El cuello puede experimentar hinchazón debido en parte a la inflamación de los ganglios linfáticos.
El tratamiento consiste en la administración de antitoxina diftérica, así como de antibióticos. La vacunación contra la difteria ha sido eficaz para reducir drásticamente la mortalidad y la morbilidad de la enfermedad. La difteria es mortal en un porcentaje que va del 5 al 10% de los casos, y la tasa de mortalidad es mayor en los niños pequeños. Con todo, en entornos con un acceso deficiente a la antitoxina diftérica, la tasa de letalidad puede llegar hasta el 40%.
Respuesta de salud pública
- Guinea ha reforzado la vigilancia epidemiológica para la detección precoz y el tratamiento de casos.
- A nivel regional, se están llevando a cabo reuniones diarias de coordinación y seguimiento de las actividades de respuesta bajo la dirección del inspector regional de salud y con el apoyo de la OMS, MSF de Bélgica y otros asociados de la región.
- Se ha mejorado la notificación de todos los casos sospechosos de difteria, el inicio de las investigaciones y el seguimiento temprano de los contactos.
- Se están llevando a cabo el rastreo de contactos, la creación de una zona de aislamiento en el puesto de salud de Balato, en la prefectura de Kouroussa, y sesiones informativas para trabajadores de la salud sobre definición de casos y medidas de prevención.
- Con el apoyo de MSF, se están realizando actividades relacionadas con la gestión de los casos: tratamientos antibióticos (amoxicilina y azitromicina), tratamiento de casos sospechosos, profilaxis antibiótica (amoxicilina y azitromicina) de los contactos directos y tratamiento gratuito de casos en centros de tratamiento.
- Se están llevando a cabo iniciativas de comunicación de riesgos y participación de la comunidad, como sensibilizar acerca de los casos en la comunidad y seleccionar y capacitar a un comunicador para que cree conciencia entre los padres de los pacientes.
Evaluación del riesgo por la OMS
La difteria es una enfermedad que puede prevenirse mediante la vacunación, cuya causa es la Corynebacterium diphtheriae (productora de exotoxinas) y que se transmite de persona a persona a través del contacto directo físico y respiratorio. Puede causar infección de la nasofaringe, lo que puede provocar dificultades respiratorias y la muerte. La difteria es mortal en un porcentaje que va del 5% al 10% de los casos, y la tasa de mortalidad es mayor en los niños pequeños. El tratamiento consiste en la administración de antitoxina diftérica, así como de antibióticos. La vacunación contra la difteria ha reducido drásticamente la mortalidad y la morbilidad de la enfermedad.
En la actualidad, la oferta de antitoxina diftérica es muy limitada e insuficiente para responder a las demandas actuales, ya que el número de fabricantes es muy reducido y se están notificando grandes brotes en diferentes regiones del mundo.
El riesgo de difteria en Guinea se considera alto debido a la baja cobertura de inmunización con DTP3 en la región afectada (36% según la encuesta sobre cobertura en hogares, 2023) y a una cobertura nacional de inmunización con esa misma vacuna del 47% entre 2014 y 2022 (según las estimaciones de la OMS/el UNICEF). Por otra parte, el riesgo a nivel regional es moderado y, a nivel mundial, bajo. El brote también se caracteriza por una alta letalidad entre los casos confirmados. Otros factores son: el exceso de población en el distrito de salud de Siguiri, que es el epicentro de este brote, un sistema de salud debilitado y la presencia simultánea de varias epidemias en la zona.
El exceso de población en el distrito de salud de la prefectura de Siguiri, epicentro de esta epidemia, un personal de salud escaso y poco cualificado y los limitados recursos materiales del sistema de salud debilitan la respuesta a este brote. Además, el país se enfrenta a varias epidemias simultáneas en la zona, como la tos ferina, la poliomielitis y la rabia. A todo esto se suma un contexto de extrema vulnerabilidad debido a las actividades mineras, que provocan importantes desplazamientos de población, reducen la calidad del aire y aumentan el riesgo de que se produzcan desastres naturales, como inundaciones y deslizamientos de tierra, lo que afecta a la salud de las personas.
Esto recalca la necesidad urgente de reforzar la cobertura de inmunización contra la difteria en todo el país, especialmente en el epicentro, y de fortalecer el tratamiento de casos en los centros hospitalarios donde se atienden casos de esta enfermedad.
Consejos de la OMS
El control de la difteria se basa en la prevención primaria de la enfermedad garantizando una elevada tasa de inmunidad de la población mediante la vacunación, y en la prevención secundaria de la propagación, mediante una búsqueda rápida de los contactos directos para velar por el tratamiento temprano de los infectados.
Todos los países deberían contar con mecanismos de vigilancia epidemiológica que garantizasen la detección temprana de los brotes de difteria, y tener acceso a instalaciones de laboratorio para la detección fiable de C. diphtheriae toxígenas. Debería disponerse de cantidades suficientes de antitoxina diftérica a nivel nacional o regional para el tratamiento médico de los casos.
La vacunación es fundamental para prevenir casos y brotes, y un tratamiento clínico adecuado implica la administración de antitoxina diftérica, para neutralizar la toxina, y de antibióticos, para reducir las complicaciones y la mortalidad.
La OMS recomienda la pronta notificación y el tratamiento de los casos sospechosos de difteria a fin de iniciar el tratamiento oportuno de casos y hacer el seguimiento de los contactos, así como para garantizar el suministro de antitoxina diftérica.
La OMS aconseja aplicar las siguientes medidas de prevención y control de infecciones en los entornos de atención de la salud.
En el cribado/triaje, debería ubicarse inmediatamente a los pacientes con síntomas de infección de las vías respiratorias superiores (IVRS) en un área separada hasta que hayan sido examinados y agrupar a los casos probables con los pacientes con el mismo diagnóstico. Se recomienda mantener el área de aislamiento separada de otras áreas de atención al paciente.
Además de las precauciones habituales, en el caso de los pacientes que se sospeche o se haya confirmado que sufren difteria respiratoria deberían tomarse precauciones para evitar la transmisión por gotículas. En el de los pacientes que se sospeche o se haya confirmado que sufren difteria cutánea, deberían tomarse precauciones para evitar la transmisión por contacto. Se recomienda mantener un metro de distancia entre los pacientes. Es recomendable mantener bien ventiladas las áreas de atención a los pacientes. Debería evitarse que los pacientes salgan del área de aislamiento o sean transportados fuera de ella. Si deben abandonar el área de aislamiento, los pacientes deben utilizar una mascarilla médica y llevar cubierta cualquier posible herida y/o lesión.
El tratamiento de casos debería llevarse a cabo siguiendo las directrices de la OMS. Además, debería vacunarse prioritariamente a las poblaciones de alto riesgo, como los niños menores de cinco años, los niños en edad escolar, las personas de edad, los contactos directos de los casos de difteria y los trabajadores de la salud. Una respuesta coordinada y la participación de la comunidad pueden ayudar a controlar el brote en curso y evitar que siga propagándose.
En el caso de los contactos directos, está indicada la administración de antibióticos profilácticos (penicilina o eritromicina, en función de la sensibilidad antibiótica de la colonia aislada) durante siete días. Si el cultivo da positivo en Corynebacterium spp. toxigénica, debería considerarse que el contacto es un caso y recibir antibióticos durante dos semanas (no se necesita antitoxina diftérica para los casos asintomáticos o los casos sin seudomembrana).
Aunque los viajeros no corren un riesgo particular de infectarse de difteria, se recomienda que las autoridades nacionales recuerden a los viajeros que vayan a zonas con brotes de difteria que, antes de viajar, se vacunen de acuerdo con lo dispuesto en el plan nacional de vacunación establecido en cada país. Se recomienda una dosis de refuerzo si han transcurrido más de cinco años desde la última dosis.
Teniendo en cuenta la información disponible sobre este evento, la OMS desaconseja cualquier restricción a los viajes a Guinea o al comercio con este país.
Información adicional
- Página de la OMS sobre la difteria (en inglés)
- Manual for quality control of diphtheria, tetanus, pertussis and combined vaccines (en inglés)
- Diphtheria: Vaccine Preventable Diseases Surveillance Standards (en inglés)
- Transmission-based precautions for the prevention and control of infections: aide-memoire (en inglés)
- OMS. Diphtheria: Clinical management of respiratory diphtheria (en inglés)
Cita recomendada: Organización Mundial de la Salud (18 de octubre de 2023). Partes sobre brotes epidémicos - Difteria en Guinea Disponible en: https://www.who.int/es/emergencies/disease-outbreak-news/item/2023-DON492