Resumen de la situatión
Descripción de la situación
Entre el 13 de agosto de 2023 y el 1 de febrero de 2024, el Ministerio de Salud del Reino de la Arabia Saudita notificó cuatro casos de infección por el coronavirus causante del síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS-CoV), dos de los cuales fallecieron. Los casos se notificaron en las regiones de Riad, Oriental y Casim de Arabia Saudí (figura 1). Los casos fueron confirmados en laboratorio con una prueba de reacción en cadena de la polimerasa en tiempo real (RT-PCR) entre el 10 de octubre y el 16 de noviembre de 2023.
Los cuatro casos tenían enfermedades concomitantes y ninguno de ellos era trabajador de la salud. Dos de los casos eran hombres y los otros dos mujeres, de edades comprendidas entre los 59 y los 93 años. Los casos desarrollaron síntomas como fiebre, tos y dificultad para respirar, entre el 15 de septiembre de 2023 y el 26 de octubre de 2023. Las dos muertes ocurrieron el 19 de octubre de 2023 y el 24 de diciembre de 2023.
De los cuatro casos, uno era propietario de camellos y otro tenía antecedentes de contacto indirecto con dromedarios, ya que sus familiares eran propietarios de camellos. Los otros dos casos no habían estado manifiestamente expuestos a factores de riesgo conocidos. Ninguno de ellos notificó antecedentes de consumo de leche cruda de dromedaria en los 14 días anteriores a la aparición de los síntomas. No se conocen vínculos epidemiológicos entre los casos.
Desde 2012, año en que se comunicó por primera vez un caso de infección por MERS-CoV en la Arabia Saudita, se han notificado un total de 2200 casos en humanos, de los cuales 858 han fallecido. En total, se han notificado casos de infecciones humanas por MERS-CoV en 27 países de las seis regiones de la OMS. De los 2609 casos de infección por MERS-CoV y las 939 muertes por esta causa notificados a nivel mundial, el 84% y el 91%, respectivamente, se han notificado en la Arabia Saudita, incluidos estos nuevos casos notificados (figura 2). No se ha notificado ningún caso de infección por MERS-CoV en países de fuera de Oriente Medio desde 2019.
Figura 1. Distribución geográfica de los casos de infección por MERS-CoV notificados entre el 13 de agosto de 2023 y el 1 de febrero de 2024 por ciudad y región de la Arabia Saudita (n=4).
Figura 2. Curva epidémica de los casos (n=2200) y muertes (n=858) por infección por MERS-CoV notificados en la Arabia Saudita entre 2012 y 2024*
Epidemiología de la enfermedad
El síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS) es una infección vírica respiratoria causada por el MERS-CoV. Aproximadamente el 36% de los pacientes de MERS han fallecido, aunque es posible que esta cifra sea una sobreestimación de la verdadera tasa de mortalidad, pues los sistemas de vigilancia existentes pueden pasar por alto los casos leves de infección y la tasa de letalidad se calcula considerando únicamente los casos confirmados por pruebas de laboratorio.
Las personas resultan infectadas por el MERS-CoV por contacto directo o indirecto con dromedarios, que son el huésped natural y origen zoonótico del virus. Está demostrado que el MERS-CoV se puede trasmitir de una persona a otra. Por el momento, la transmisión discontinua entre humanos ha ocurrido sobre todo por el contacto cercano y en entornos de atención de salud. Fuera de los entornos de atención de salud, la transmisión de persona a persona ha sido limitada.
La infección por MERS-CoV puede ser asintomática o causar desde síntomas respiratorios leves hasta cuadros respiratorios agudos graves con desenlace mortal. Un cuadro típico de MERS es la presencia de fiebre, tos y dificultades respiratorias. La neumonía es una manifestación habitual, aunque no siempre está presente. También se han notificado síntomas gastrointestinales, entre ellos, diarrea. La forma grave de la enfermedad puede causar una insuficiencia respiratoria que requiera respiración artificial y soporte vital en una unidad de cuidados intensivos. Se ha observado que el virus causa cuadros más graves en las personas de edad, las inmunodeprimidas y las aquejadas por afecciones concomitantes o enfermedades crónicas como nefropatía, cáncer, neumopatía crónica o diabetes.
El número de casos de infección por MERS-CoV notificados a la OMS ha disminuido sustancialmente desde el comienzo de la actual pandemia de COVID-19. En un inicio, es probable que esto se debiera a la prioridad otorgada a las actividades de vigilancia epidemiológica de la COVID-19. Ambas infecciones presentan cuadros clínicos similares, lo que puede resultar en la reducción del número de pruebas realizadas para detectar la infección por MERS-CoV y, con ello, del número de casos detectados. Además, es probable que las medidas para frenar la transmisión del SARS-CoV-2 (como el uso de mascarilla, la higiene de manos, el distanciamiento físico, una mejor ventilación de los espacios interiores, la precaución al toser y estornudar, los confinamientos prescriptivos o las restricciones de desplazamientos) también reduzcan las posibilidades de transmisión del MERS-CoV de persona a persona. Se ha planteado la hipótesis de una posible protección cruzada contra el coronavirus causante del síndrome respiratorio de Oriente Medio conferida por la infección por SARS-CoV-2 o la vacuna contra este virus que reduzca la gravedad de la infección o el cuadro de MERS-CoV y viceversa, pero se requiere mayor investigación.
Por el momento no se dispone de vacunas o tratamientos específicos contra el MERS-CoV, aunque tanto unas como otros están en desarrollo. El tratamiento es sintomático y depende del estado clínico y la sintomatología del paciente.
Respuesta de salud pública
El Ministerio de Salud efectuó un seguimiento de los contactos directos de los cuatro casos, sin que se detectara ningún caso secundario.
En los dos casos que notificaron haber estado en contacto directo o indirecto con dromedarios, se informó al Ministerio de Agricultura y se llevaron a cabo análisis de los rebaños. Los dromedarios no presentaron síntomas, pero no se envió a la OMS ningún resultado de laboratorio de la investigación de los animales. Los dromedarios infectados por MERS-CoV pueden no mostrar ningún signo de estarlo, lo que hace que sea imposible determinar si un dromedario o un rebaño es infectante sin llevar a cabo un análisis de laboratorio. Las medidas preventivas como las buenas prácticas de higiene, incluido el lavado de manos a conciencia antes y después de estar en contacto con dromedarios y el tratamiento térmico de los productos obtenidos de los dromedarios, deben aplicarse siempre.
Evaluación del riesgo por la OMS
La notificación de estos cuatro casos no modifica la evaluación general del riesgo, que se considera moderado tanto a nivel mundial como regional. Se cree que los cuatro nuevos casos notificados entre el 13 de agosto de 2023 y el 1 de febrero de 2024 se han infectado por MERS-CoV a nivel local y no han transmitido la infección a otras personas.
La OMS considera previsible que se notifiquen nuevos casos de infección por MERS-CoV en Oriente Medio u otros países en los que el virus circula en la población de dromedarios, y también que la infección se siga exportando a otros países por personas que hayan estado expuestas al virus al entrar en contacto con dromedarios o productos de estos (como el consumo de leche cruda de dromedaria) o en un establecimiento de atención de salud.
La OMS sigue observando la situación epidemiológica y realiza evaluaciones del riesgo basadas en la información más reciente.
Consejos de la OMS
Atendiendo a la situación actual y a la información disponible, la OMS insiste en la importancia de que todos los Estados Miembros mantengan una rigurosa vigilancia de las infecciones respiratorias agudas, entre ellas la infección por MERS-CoV, y examinen e investiguen detenidamente toda situación inusual.
La transmisión de persona a persona del MERS-CoV en establecimientos de salud ha sido asociada a la tardanza en reconocer los primeros síntomas de la infección, la lentitud en el triaje de los casos sospechosos y una aplicación tardía de las medidas de prevención y control de infecciones (PCI). Estas medidas son fundamentales para impedir la posible propagación del MERS-CoV entre las personas en los establecimientos de salud. Los trabajadores de la salud deben aplicar las precauciones habituales en todo momento y con todos los pacientes en cada interacción que tenga lugar en los establecimientos de salud.
Cuando se atienda a pacientes con infección por el MERS-CoV, a las precauciones habituales deberán sumarse las precauciones para evitar la transmisión por contacto o por gotículas respiratorias, lo que incluye el uso de equipos de protección personal (EPP) como batas limpias no estériles, guantes, protección para los ojos y mascarilla médica. Cuando se lleven a cabo procedimientos que generen aerosoles y en los lugares en los estos se realizan se deberán adoptar precauciones para evitar la transmisión aérea. La detección precoz, el tratamiento y aislamiento de los pacientes y la cuarentena de los contactos, junto con las medidas adecuadas de PCI en los establecimientos de salud y la sensibilización de la población en materia de salud pública, pueden prevenir la transmisión entre personas del MERS-CoV.
Se ha observado que el MERS-CoV provoca cuadros más graves en personas con afecciones crónicas de base como diabetes, insuficiencia renal, neumopatía crónica o inmunodepresión. Por consiguiente, las personas que padecen esas enfermedades deberían evitar el contacto estrecho con animales, en particular dromedarios, cuando visiten granjas, mercados o establos donde el virus pueda estar en circulación. También se deben adoptar medidas generales de higiene, como lavarse sistemáticamente las manos antes y después de tocar animales y evitar todo contacto con animales enfermos.
Además, deben aplicarse medidas de higiene alimentaria. Hay que evitar el consumo de leche cruda de dromedaria, el contacto con la orina de dromedario o el consumo de carne de estos animales que no esté completamente cocinada. El consumo de productos de origen animal crudos o insuficientemente cocinados, incluidas la leche y la carne, conlleva un riesgo elevado de infección por patógenos que puede causar enfermedades en los seres humanos. Los productos de origen animal que se procesan adecuadamente mediante cocción o pasteurización son seguros para el consumo, pero incluso esos productos deben manipularse con cuidado para evitar una contaminación cruzada con alimentos crudos o impropios para el consumo. La carne y la leche de dromedaria son productos nutritivos que pueden seguir consumiéndose después de la cocción, la pasteurización u otros tratamientos térmicos.
En relación con este evento, la OMS no recomienda actualmente realizar pruebas especiales de detección en los puntos de entrada ni aplicar restricciones a los viajes ni al comercio.
Información adicional
- Nota descriptiva de la OMS sobre el coronavirus causante del síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS-CoV)
- OMS, Síndrome respiratorio de Oriente Medio: resumen y evaluación mundiales de la OMS sobre el riesgo de MERS, 16 de noviembre de 2022 (en inglés)
- Actualización n.º 88 de la Red OMS de Información sobre Epidemias: MERS-CoV, a circulating coronavirus with epidemic and pandemic potential - Pandemic preparedness, prevention and response with a One Health approach (en inglés)
- Seminario web de la Red OMS de Información sobre Epidemias: MERS-CoV, a circulating coronavirus with epidemic and pandemic potential - Pandemic preparedness, prevention and response with a One Health approach (en inglés)
- Recursos relativos al síndrome respiratorio de Oriente Medio (en inglés)
- Descripción genral del síndrome respiratorio de Oriente Medio (en inglés)
- Boletín mensual de la Región del Mediterráneo Oriental de la OMS sobre el MERS (en inglés)
- Brote de MERS en la República de Corea, 2015 (en inglés)
- Organismo de control y prevención de enfermedades de Corea, brote de síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS) en 2015 (en inglés)
- Manual de la OMS sobre las cinco claves para la inocuidad de los alimentos, 29 de agosto de 2023
- Partes sobre brotes epidémicos; Coronavirus causante del síndrome respiratorio de Oriente Medio - Reino de la Arabia Saudita. Disponible en: https://www.who.int/es/emergencies/disease-outbreak-news/item/2023-DON484
Cita recomendada: Organización Mundial de la Salud, 16 de febrero de 2024. Partes sobre brotes epidémicos; Coronavirus causante del síndrome respiratorio de Oriente Medio - Reino de la Arabia Saudita. Disponible en: https://www.who.int/es/emergencies/disease-outbreak-news/item/2024-DON506