Gripe aviar

16 de mayo de 2024 | Preguntas y respuestas

La gripe aviar, a veces conocida como gripe de las aves, es una enfermedad causada por un virus que afecta principalmente a las aves, pero que también puede afectar a los mamíferos, incluidos los seres humanos. Su principal vía de propagación desde las aves infectadas a los seres humanos es el contacto directo con aves o entornos contaminados, por ejemplo, en explotaciones avícolas de corral domésticas y en mercados de venta de aves. También se han notificado unos pocos casos de transmisión desde otros tipos de animales infectados a seres humanos.

Los síntomas en las personas pueden ser desde leves hasta graves, y en algunos casos pueden llegar a ser mortales. Los síntomas más comunes son de carácter respiratorio, por ejemplo, tos, disnea o dificultad para respirar, y dolor de garganta, aunque también se han notificado síntomas no respiratorios, como fatiga y dolores musculares o corporales. También se han detectado infecciones asintomáticas en seres humanos que habían estado expuestos a animales infectados o a su entorno. 

Las personas que están en contacto con aves de corral infectadas (vivas o muertas) o con entornos contaminados, como granjas o mercados de aves vivas, se encuentran en riesgo de exposición a los virus de la gripe aviar. También hay otros factores de riesgo, como el sacrificio, el desplume, la manipulación de canales y la preparación de las aves para el consumo, en particular en hogares o en corrales domésticos.

Los virus de la gripe aviar también pueden infectar a los mamíferos. Cada vez hay más informes mundiales de infecciones por gripe aviar en animales como visones, zorros o gatos, tanto salvajes como domésticos, y, más recientemente, en vacas lecheras en los Estados Unidos de América. También se ha documentado la propagación desde mamíferos a seres humanos.

Si bien hasta ahora las infecciones en seres humanos por virus de la gripe aviar han sido escasas y esporádicas, las personas que viven o visitan regiones donde hay brotes activos en aves u otros animales deberían tomar precauciones y supervisar su estado de salud. Si presenta síntomas seudogripales, consulte a su profesional de la salud local. 

En las zonas donde existan brotes de gripe aviar en animales, evite:

  • el contacto con animales enfermos o muertos
  • el contacto con animales en granjas y mercados de animales
  • la entrada en zonas donde podrían sacrificarse animales
  • el contacto con cualquier superficie que parezca estar contaminada con excrementos de animales
  • sacrificar o comer animales enfermos.

Siga las buenas prácticas de inocuidad de los alimentos, como evitar el consumo de leche, huevos y carne crudos; y practique la higiene de manos, en particular el lavado regular con agua y jabón.

Solicite atención médica de inmediato si vive o ha visitado recientemente una zona donde haya un brote de gripe aviar (también denominada gripe de las aves) que esté afectando a aves de corral domésticas, aves silvestres u otros animales y padece síntomas seudogripales, como fiebre, tos y dificultad para respirar, conjuntivitis u otros síntomas sin causa conocida. Notifique a su profesional de la salud toda exposición a animales enfermos o muertos que haya experimentado.

Además, adopte medidas de protección:

  • use mascarilla y limite el contacto con otras personas;
  • mantenga una buena higiene respiratoria, cubriéndose la boca y la nariz al toser o estornudar, y deshaciéndose correctamente de los pañuelos desechables;
  • mejore la ventilación cuando esté en espacios interiores;
  • evite tocarse los ojos, la nariz y la boca; y
  • lávese las manos con agua y jabón de manera regular. 

  • Los productos cárnicos y los huevos pueden consumirse sin peligro, siempre que se preparen de forma adecuada. Para obtener información detallada, consulte la pregunta «¿Cómo se pueden preparar de manera segura la carne y los huevos?»
  • El consumo de carne y huevos crudos o poco cocidos procedentes de zonas donde hay brotes de gripe aviar supone un alto riesgo y debería evitarse. Del mismo modo, no se deberían comer animales enfermos o que hayan muerto de forma inesperada.
  • Dados los posibles riesgos que supone para la salud de los consumidores, debería evitarse la leche cruda. La OMS recomienda consumir leche pasteurizada. Si no se dispone de ella, calentando la leche cruda hasta la ebullición se logra que su consumo sea más inocuo.

Siga las Cinco claves de la OMS para la inocuidad de los alimentos:

  • mantenga la limpieza
  • separe los alimentos crudos de los cocinados
  • cocine completamente
  • mantenga los alimentos a temperaturas seguras
  • utilice agua y materias primas seguras.

Obtenga más información sobre la manipulación segura de alimentos.

En el marco de su labor de preparación frente a pandemias de gripe, algunos países han desarrollado y autorizado vacunas que se podrían utilizar contra los virus de la gripe aviar. Actualmente, se producen escasas infecciones de gripe aviar en seres humanos  y no se recomienda la vacunación.

En el contexto de la aplicación del Marco de PIP, la OMS ha llegado a acuerdos con 15 fabricantes de vacunas para poder acceder, en tiempo real, a alrededor del 10% de la futura producción de vacunas contra la gripe pandémica, en caso de pandemia de esta enfermedad. Estas vacunas se distribuirán a los países en función de las necesidades de la salud pública y los riesgos para esta.

La vacuna contra la gripe estacional no protege de la gripe aviar, pero puede reducir la probabilidad de infectarse simultáneamente con los virus de ambas enfermedades (infecciones dobles). 

Los pacientes con gripe deberían ser tratados adecuadamente para prevenir enfermedades graves y la muerte. Los pacientes con infección por el virus de la gripe que esté confirmada en laboratorio y que padezcan un cuadro clínico progresivo, con complicaciones o grave (o aquellos con un cuadro clínico asintomático o leve pero que estén en mayor riesgo de contraer enfermedad grave) deberían ser tratados lo antes posible con medicamentos antivirales, por ejemplo, oseltamivir.

Actualmente, la OMS no recomienda imponer restricciones a los viajes motivadas por la gripe aviar. Sin embargo, hay una serie medidas que pueden adoptar los viajeros  para reducir el riesgo de infección. Sírvase consultar la pregunta «¿Qué puede hacer para protegerse de las infecciones de gripe aviar?»

Si bien en algunos casos en los que ha habido contacto estrecho o prolongado con una persona infectada puede haberse producido una transmisión muy limitada de virus de la gripe aviar entre humanos, hasta la fecha no se ha observado una transmisión sostenida entre personas (propagación entre humanos). De los 28 casos en seres humanos que se han notificado a la OMS desde 2021, no se ha comunicado ninguna transmisión de persona a persona.